El 8 de mayo se conmemora el Día Mundial del Asma, una oportunidad para recordar que esta enfermedad respiratoria no solo afecta a nivel personal, sino que también tiene un impacto directo en el entorno laboral. El asma laboral, provocado o agravado por las condiciones de trabajo, es una realidad creciente en muchos sectores. Como empresa, ignorar este riesgo puede traducirse en graves consecuencias tanto para la salud de tu plantilla como para la estabilidad legal y económica de tu organización.

¿Qué es el asma laboral y por qué debe preocuparte?

El asma laboral es una enfermedad profesional que aparece como consecuencia de la exposición a determinadas sustancias presentes en el ambiente de trabajo. Polvos, vapores, gases, productos químicos o alérgenos pueden desencadenar esta patología en personas previamente sanas o agravar casos preexistentes.

No se trata solo de una cuestión de salud individual: cuando una persona desarrolla asma laboral, tu empresa puede enfrentarse a bajas prolongadas, pérdida de productividad, sanciones legales y recargos por falta de medidas preventivas adecuadas.

Sectores y trabajos con mayor riesgo de asma laboral

Aunque cualquier entorno laboral puede albergar riesgos, existen sectores especialmente sensibles:

• Industria química y farmacéutica: exposición a isocianatos, sales metálicas o antibióticos.
   
• Construcción y carpintería: contacto con polvo de madera, cemento o sílice.
   
• Panaderías y alimentación: harinas, enzimas y otros alérgenos.
   
• Sanidad y limpieza: uso de desinfectantes, látex o productos de limpieza agresivos.
   
• Pintura y automoción: vapores de disolventes y pinturas.

Medidas preventivas: protege a tu plantilla y protege tu empresa

La prevención de riesgos laborales es la mejor herramienta frente al asma laboral. Como empresario, estás obligado a garantizar un entorno seguro a través de:

• Evaluación de riesgos específica: identifica sustancias sensibilizantes o irritantes en tus procesos.
   
• Medidas técnicas de control: instalación de sistemas de ventilación, extracción localizada o sustitución de productos peligrosos por otros menos nocivos.
   
• Uso obligatorio de EPIs: mascarillas adecuadas y equipos de protección respiratoria.
   
• Formación e información: asegura que tu plantilla conozca los riesgos y cómo protegerse.
   
• Vigilancia de la salud: controles médicos periódicos para detectar síntomas tempranos.
   

Consecuencias legales del asma laboral en tu empresa

Si en tu empresa se diagnostica un caso de asma laboral y no se han tomado las medidas preventivas adecuadas, te expones a:

• Recargos en las prestaciones por falta de medidas de seguridad.
   
• Sanciones económicas por incumplimiento de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales.
   
• Responsabilidad civil y penal si se demuestra negligencia.
   
• Daños reputacionales y pérdida de confianza por parte de clientes y plantilla.
   

La prevención es una inversión, no un gasto. Contar con un Servicio de Prevención especializado es clave para evitar que un problema de salud laboral se convierta en una crisis legal y económica.

Enlace a la noticia original de EUROPREVEN: https://www.europreven.es/noticia/asma-laboral-el-riesgo-oculto-que-puede-afectar-a-tu-empresa